jueves, 23 de diciembre de 2010

Capitulo X [10]

La rubia oxigenada abrió la boca y dijo…
-No fue una buena idea venir a una audición con esas fachas… eso te resta puntos, ahora apúrate y canta algo_ su voz era aguda y con un toque de agresividad.

        Mis manos empezaron a sudar, tenia un nudo en la garganta y el estomago, mi corazón estaba demasiado acelerado. Oculte mis manos en mis bolsillos y cante lo único que se me ocurrió olvidando así la canción que tenia preparada para ese día.

-It’s just you and me and there’s no one around. Feel like I’m hanging by a thread it’s a long way down. I’ve been trying to breathe but I’m fighting for air. I’m at an all time low with no place to go but you’re always there when everything falls apart…  Estaba por terminar la estrofa cuando otra vez la rubiecita esa abrió su gran bocota.

-Hay mi vida, siento decirte que…- En ese momento la interrumpe el joven que estaba del otro lado
-Tienes una bonita voz, pasa por esa puerta y espera que te llamen… ¿tu nombre es?
-Liz Stroup
-Bien Liz, haz lo que te dije…
-Muchas gracias_ dije con un deje de intranquilidad en mi voz, ahora si no había vuelta a tras, tendría que enfrentarme a esas personas y cantar como nunca lo había hecho.

        Al pasar por la puerta me encontré a la típica sala de espera otra vez, con mas o menos 7 personas… algunas caras me sonrieron otras me miraron intimidantemente, me senté en una silla vacía y espere…espere…espere… y bueno en realidad solo fueron 20 minutos, pero unos 20m llenos de tensión.

        Apareció un hombre y me llamo, yo estaba como la gelatina me condujo hacia el interior de una cabina con solo una silla y un micrófono al sentarme vi a través del vidrio las figuras que se ocultaban al otro lado.

        Entre en pánico totalmente, del otro lado se encontraban dos señores algo mayores, y a su derecha los tres chicos de la banda supuse… muy guapos todos a decir verdad pero entre ellos se encontraba el chico misterioso, el de esos hipnóticos ojos grises, no puedo creerlo, el destino me estaba jugando un mala jugada, ese joven me había cautivado desde que lo vi, prácticamente me enamoro con solo con verlo en la calle y ahora es uno de los integrantes de la banda que pasaría demasiado tiempo conmigo si llegaba a ganar.

Mis nervios aumentaron de 1 a 1000, sentía que se me saldría el corazón por la boca y me ardían las mejillas. Esos ojos mirándome mientras canto, seria el momento mas avergonzarte de mi corta vida, por suerte estaba sentado derecho pero sin verme a mi, había algo más importante en su teléfono, que pasara cuando esos ojos me mires, cuando se fijen en mi o cuando nuestras miradas se crucen. De pronto me encontraba rezándoles a todos los santos que él no levantara la vista de su teléfono hasta que yo haya salido de la habitación. Cuando notaron mi presencia, claro todos menos el de los ojazos, uno de los señores se dirigió a mí.

-Hola Liz! Mucho gusto… mi nombre es Marco Vincent, este es mi hermano Peter Vincent_señalando al hombre a su lado_ y ellos son Lucas, Adam y Christopher_ cada uno de los chicos levanto la mano he hicieron un pequeño gesto cuando los mencionaron, menos el de los ojazos que segundos después entendí cual era su nombre… Christopher… El estaba  seguía encantado con algo en su teléfono y por suerte no levanto la vista_ Te detienes cuando yo te lo pida por favor… Puedes iniciar cuando quieras_ dijo el tal “Marco” y me dio una cálida sonrisa mientras “Peter” me miraba con cierta antipatía.

        Rápidamente me coloque los auriculares que estaban ahí y oculte mis manos por los nervios. Le hice una pequeña señal con la cabeza al de los controles para que empezara a sonar la pista. Cuando inicio cante lo mejor que pude, segundos después de haber iniciado mis suplicas no fueron suficientes ya que Christopher levanto la vista y nuestras miradas se encontraron, yo rápidamente voltee la cara y seguí cantando como si nada, pero sentí el poder de su mirada en toda la parte de la canción. A la mitad de la canción Marco levanto una mano y pare de cantar, anoto algo rápidamente en un papel y luego todos se quedaron observándome varios segundos y nadie decía nada, me puse nerviosa y pensé que ese había sido el fin de mi carrera, cuando ni siquiera había comenzado, hasta que el señor Marco se paro de su silla y…
_________________________________________
No se si pueda el próximo jueves publicar porque nace la hermanita de una amiga y tengo que estar ahí! :P así que veré como hago pero les subiré la historia cuando pueda, y si no puedo aviso :D!! FELIZ NAVIDAD [despues les pongo lo del año nuevo y Blah Blah Blaj] a todas mis seguidoras y a las que no lo son también :P

jueves, 16 de diciembre de 2010

Capitulo IX [9]

Holaaaa.... Perdonen por la tardazan, bueno perdonen por no escribir en casi un mes, pero el colegio es demasiado trabajoo.... aqui les tengo un capitulo tardisimo pero seguro :)
_____________________________________________________


-Pero yo…_dije tartamudeando un poco_ no puedo, ya me estoy instalando aquí y no puedo dejar a Grace le da miedo dormir sola, además y el trabajo? Me costo mucho conseguirlo no lo puedo dejar así como que así con solo un día de trabajo
-Mira por el trabajo no te preocupes, la mayoría son clases individuales y puedes hacer que todas sean en la tarde así podrías ir al trabajo en la mañana y por Grace no te preocupes puedo quedarme con ella ese mes… por fis! Tienes que hacerlo!
-Yo… no se, no puedo… ósea se que prometí hacer todo lo posible por cantar pero… es muy pronto no se si pueda, era mi padre dioz… y aunque el no quería que me dedicara al canto, él disfrutaba oyéndome… no creo que pueda
-Vamos solo inténtalo, vas a la audición cantas algo y luego regresas a casa… no pierdes nada, anda!!
-Bueno, esta bien_ tenia razón nada perdía con intentarlo
-AHHHHH_ Gritaron entre las dos y empezaron a parlotear sobre que me pondría y muchísimas otras cosas, yo me desenchufe del mundo y fui a mi cuarto, saque el pequeño libro de letras de debajo de mi colchón y empecé a leerlas para ver cual iba a cantar en la audición, me decidí por una de romance que había escrito a los 17 años, ya saben para el primer amor.

        Al día siguiente me desperté con un cosquilleo en la panza, estaba nerviosa y mucho. Fui directamente al closet y me puse lo primero que vi, Salí rápidamente del depa para irme al trabajo. En él todos notaron que estaba distraída y ¿Quién no? Me la pasaba viendo nada en especial, perdida en mis pensamientos y como secuela tropecé varias veces y se me olvidaban algunos detalles como llevar Ketchup a la mesa 3, luego de eso anote cada pequeño detalle. Le explique a la Sra. Berry lo de la audición para que estuviera al tanto y me deseo suerte.

        Acababa de salir del local y ya me encontraba caminando por las atestadas calles de Londres, llegue al depa y rápidamente me metí al baño, contaba con 2 horas para prepararme y comer algo. Me puse la ropa que habían preparado Grace y Alexia la noche anterior.

        Acababa de llegar al establecimiento en donde seria la audición, bueno en realidad a unas cuantas cuadras mas abajo, ya que la cola que había era interminable, espere un rato ahí… me había negado a que Grace y/o Alexia me acompañaran y ahora entiendo que no fue una buena idea.

        Pasada 1 hora, paso un muchacho como de mi edad explicando muy claramente como era la audición. Ibamos a entrar dentro de un estudio de grabación, cantaríamos lo que tuviéramos preparado y si teníamos suerte nos llamarían después, también informo que no se sabia si iban a hacer una semifinal, ya que como eran las ultimas audiciones y solo quedaban dos puestos libre, no sabían si iba a ser necesario.

Y como si fuera poco nos dijo que eran dos fases. En la primera fase pasaríamos frente a un jurado pequeño y cantaríamos una sola estrofa, estas personas decidiría si valía la pena nos pasaban a la fase dos que entrábamos y cantábamos frente a la “bendita banda” y el “empresario” y para peor nos grabarían para yo que sé…. Ósea 2 pruebas, cantar 2 veces, no creo que mi corazón aguante más de una.

Al entrar todo era muy lujoso, piedras preciosas por donde sea y muy luminoso. Tuve que esperar un rato en una pequeña sala de espera con chicos de diversas edades tan nerviosos como yo, por una puerta apareció una chica bastante rara a decir verdad, me llamo y me dijo que pasara por una puerta algo extraña. Entre a una pequeña habitación muy oscura donde solo  una silla, me senté en ella y como en las películas apenas lo hice se encendió una luz y frente a mi había tres sillas ocupadas. En la primera había un chico que no superaba los 15 años, en el medio había un señor con unas gafas horribles al cual le calculo unos 40 y algo años, y en la ultima había un chica, como de mi edad de esas rubias oxigenadas que los chicos se paran a ver por su cuerpo lleno de cirugías. La rubia oxigenada abrió la boca y dijo…